La infanta Sofía (18 años) rompía con el misterio al reaparecer este martes en el último acto público presidido por los reyes Felipe y Letizia en el Palacio de la Zarzuela. Una cita con el Patronato de la Fundación Comité Español de Colegios del Mundo Unido (UWC) y que también ha supuesto el reencuentro con algunos alumnos que, como ella, vuelven a casa tras sus dos años de experiencia.
Relajada y participativa en los coloquios, llamó la atención la elección la elección estilística que hizo para este día de verano en la capital. Y no porque no fuera apropiado, sino porque se trata del mismo vestido que llevó hace un año en Mallorca. Un vestido midi sin mangas confeccionado en lino de color verde jade que perteneció a la reina Letizia y ella rescató para una cena familiar en Palma.
"El rey está impecable. La corbata azul y la camisa de estilo clásico combina ideal con el traje gris. Le queda todo perfecto"
"Este vestido encaja totalmente con su silueta por el juego de los pliegues que estiliza muchísimo más. El tema de usar alpargatas tampoco me molesta pero el vestido en ese tono beige le apaga un poco la tez, entonces no me termina de gustar.
La infanta Sofía ha llevado un look similar al de su madre pero no. El vestido le hace unas arrugas muy raras, se desproporciona. No está ajustado a su cuerpo como si lo hace el de la Reina, queda muy mal. Al zapato nude le tengo manía, queda fatal. Además, es un color que no favorece demasiado y la estructura del vestido le aprieta muchísimo en la parte de arriba y abajo queda más holgado. Hace una silueta muy rara. Para su silueta no es el mejor vestido. Te debes poner un tipo de vestido y otro para potenciar lo bueno y creo que este no potencia la silueta de nadie.
